Pimienta de Sichuan: ¿cómo cultivar pimienta de Sichuan?

La planta de la pimienta de Sichuan ofrece estas famosas bayas picantes que se encuentran en muchos platos. Este arbusto se cultiva fácilmente en nuestras latitudes y puede darle sabor a todos nuestros platos preferidos. Descubre cómo cultivar la pimienta de Sichuan, esa especie asiática con un sabor único.

¿Dónde, cuándo y cómo plantar la pimienta de Sichuan?

Dos períodos son ideales para plantar la planta de pimienta de Sichuan: otoño o primavera. Estas dos estaciones son preferibles aunque, en realidad, la planta del pimiento se pueda plantar en cualquier época del año, pero siempre fuera de períodos de heladas y altas temperaturas.

No es exigente con el tipo de suelo, pero evite los suelos demasiado húmedos, las raíces no lo soportan.

Cuando plantee, añada fertilizante al fondo del agujero, mejorará el arraigo y el crecimiento de la pimienta de Sichuan. Su plantación no difiere de la de un arbusto clásico. Riega generosamente y luego regularmente sin ahogar las raíces.

Plantación en maceta:

Si opta por plantar en contenedores, recuerde trasplantar su planta cada dos o tres años o podría quedarse sin espacio y sofocarse. Elija una olla o bandeja perforado en la parte inferior, añada una cama de guijarros de arcilla para el drenaje y utilice tierra especial de cítricos.

¿Cómo mantener la planta de pimienta de Sichuan?

Una vez instalada, la planta de pimiento no requiere realmente cuidados. Sin embargo, para obtener el mejor rendimiento, tenga en cuenta agua regularmente tu planta cuando hace calor. En macetas, no tiene acceso a los recursos de la tierra, por lo que el riego regular es aún más importante.

No es susceptible a las enfermedades del jardín, pero en ocasiones es víctima de los ataques de los pulgones.

La cosecha

La vendimia suele realizarse entre septiembre y octubre, a veces incluso un poco antes, a finales de verano. Cuando llegue el momento, verá pequeñas bahías en la película rosa. Es esa película la que da el fruto y no la bola pequeña. La técnica de cosechar consiste en poner una sábana debajo del árbol y sacudir las ramas para que caigan las bolas de pimiento. A continuación, basta con secarlos y recoger el caparazón rosa. De hecho, a diferencia de la pimienta clásica, el interior no es comestible.