¿Cómo comer granada?

Sin duda, es uno de los frutos que más significados aglutina para muchas culturas y religiones. A menudo símbolo de prosperidad y fertilidad, la granada es ahora una fruta bastante habitual en las paradas de frutas y verduras. Pero, ¿cómo elegirlo, pelarlo y probarlo? ¿Con qué productos asociarle? ¡Velo enseguida!

Una fruta con muchos beneficios

Baja en calorías, la granada es realmente conocida por estar llena de elementos beneficiosos para la salud. En primer lugar, está en gran antioxidante, que le permite tener efectos positivos en la lucha contra el cáncer y la enfermedad de Alzheimer. Por su parte, su contenido en vitaminas, la convierte en una fruta perfecta para aumentar el sistema inmunitario y mejorar la circulación y la presión arterial.

Escoger la granada adecuada y desgranarla

Como ocurre con muchas frutas, la mejor manera de elegir la granada adecuada es confiar en tu instinto. En cuanto al aspecto, elija aquellos que sean suaves, que no los tengan. sin manchas marrones y que adoptan un color marrón más bien claro – que puede ir al rojo. Si lo toca ligeramente y escucha a sonido casi metálico, es bueno para comer.

En cuanto a la conservación, sólo es necesario mantenerlo a temperatura ambiente hasta varias semanas. Y para desgranarlo, lo fácil es cortarlo por la mitad y vaciarlo a mano o con un tenedor para recoger las semillas. Estos también se llaman arilos.

¿En qué recetas lo incluye?

Pero ahora, una vez pelada, a veces cuesta integrar a la granada en nuestra dieta. Lo más evidente es, por supuesto, el hacer un zumo con los ariles. Es posible potenciarlo con otros jugos: zanahoria, naranja o incluso manzana, todo casero, ¡claro!

De lo contrario, también tiene muy buen gusto en ensalada con quinoa, queso de cabra, ensalada verde, zanahoria para sabores frescos y picantes. ¡A ti te toca componer según tus gustos y con verduras de temporada!

Las semillas de granada también se utilizan ampliamente postre y recetas dulces. Se pueden incorporar a pasteles – por ejemplo los basados ​​en frutas exóticas – o ensaladas de frutas. También son sabrosas sorbete.

Si no se aconseja cocinarlos con riesgo de reventar, los arilos de la granada todavía pueden formar parte de platos calientes y salados. En salsas y abonos que acompañan especialmente la carne, o con pescado blanco al horno en naranja.

Como habrá entendido, la granada es perfecta para aportar un poco de dulce y picante a cualquier receta!

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